Perdonar (y no olvidar) que alguien te ha producido un daño –decía La Rochefoucauld- te garantiza su doble rencor: por tu benevolencia, además de por tu buena memoria. Olvidar (y no perdonar) en cambio, te asegura una nueva decepción cuando no un doble agravio: por tu condena ajena, y por tu capacidad de olvido... o (que te empujen a) tropezar 87 veces con la misma piedra. Como siempre, prefiero la decepción propia al rencor ajeno.... para jueces los de linea... y lo pasado, pasado está, fuera como fuera (de juego).
|
Para diminuta, con la boca pequeña "una puerta con acceso a un lugar al que nadie nunca antes hubiese consentido en traspasar, una puerta conectada con la realidad" “una especie de perdida constante de un nivel normal de realidad” Antonin Artaud ![]() Todo lo que no es, por lo que sea... y la sensación de perdida constante en todo momento de toda esa no-realidad (existente en tanto que sentida)... además del ansia -y por su fuera poco- la culpa que ello comporta... una especie de nostalgia instantanea y acusadora, paralela al hecho sucedido, asociada al “ser” en cada momento e inmediata por todo lo que no es, lo no-hecho, todo lo no-acontecido (que siempre resulta infinitamente superior, en cantidad y cualitativamente de lo -poco, y decepcionante- que "es" y –nos- tiene lugar)... nos son, y somos lo que no es, aquello que no tiene nombre.
|
![]() La teoría del caos aplicada a la vida cotidiana... Tomar un cafè doble, un cortado o uno descafeinado puede determinar o no el nacimiento de un retoño; si es con sacarina la parejita. Un cordón roto la muerte de un desconocido; una cruz mal colocada en una opción con quién compartirás tu vida, de que trabajarás, o si la felicidad, como Avón, llamará a tu puerta... No exagero: si analizamos dónde y cómo estamos y el factor insignificante que nos empujó ahí lo comprobaremos, al menos en muchas de nuestras facetas... en las otras también resulta ser así, pero no alcanzamos a comprenderlo. No es que cada instante contenga todo nuestro futuro –escribo, enciendo otro cigarro y sorbo el café, tan solo eso-... como tampoco que cada momento se erija en el centro de nuestras vidas, ¡qué angustia!... Se trata más bien de pequeños momentos claves y ocultos, invisibles cruces de caminos, inapreciables e imprevistos giros, ligeros pero determinantes puntos de inflexión en curvas demasiado amplias como para apreciar los cambios de tendencias, ya de por si desconocidas. Ser consciente de esta realidad, de lo absurda y azarosamente que se construye “la realidad” produce angustia y desconcierto, una ligereza abrumadora... o una libertad e inocencia absoluta, pues conocemos nuestra inconsecuencia y el libre albedrío... de las cosas: estamos y llegaremos dónde ellas decidan. No te preocuparás por el futuro en vano, pues nos corresponde como objetos que somos.
|
Clip In-komunikazioa Clip Bidartean
|
“mon lo baila todo”, glòria ¡Tatoooos!... Me liaron (sin mucho esfuerzo todo hay que decirlo, ya nos conocemos... uno mismo y entre nosotros) para ir a todos los colombianos, latinos, sudamericanos, tropicales, sabrosones y rincones.... no es que la música me entusiasme, pero los gin tonics son como tiene que ser, con medio vaso de licor... La escena del fin de semana... un garito... un after... no recuerdo dónde... una morenita pequeñita guapísima... borrosa... bailando bon jovi en la oscuridad, iluminándose con una linterna en una mano y un matamoscas (spray, no de los clasicos) en la otra... Os encuentro a faltar, un beso.
|
![]() ... Así que nada quedaría en el tintero, ni por respeto o educación –excesiva- ni por miedo a perder aquello que tengamos: familia, pareja, amistad... Seríamos conscientes de nuestros errores y daríamos a entender, clara, explícitamente, aquello que nos desagrada de los otros... y mejorar claro, si es que realmente nos importan los demás y nuestro propio concepto, de nosotros mismos por subjetivos que seamos... Sinceramente desconozco si esta modesta proposición dará como resultado un asesinato colectivo... tu también hijo míooooo... o un mundo mejor, menos hipócrita y más sincero, auténtico en definitiva, donde pudiera hablarse -hacia fuera- con los nuestros, y además escuchasemos y además hiciésemos algo al respecto... Demasiados ademases creo, y pocos ademanes... En cualquiera de ambos casos... ¡me importa un bledo!
|
![]()
|
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55 56 57 58 59 60 61 62 63 64 65 66 67 68 69 70 71 72 73 74 75 76 77 78 79 80 81 82 83 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 96 97 98 99 100 101 102 103 104 105 106