basado en hechos jodidamente reales...

Si resultó incomoda la avería de la nevera, no os cuento lo que supone disponer de dos váteres... y tener que deshacerse de uno de ellos!... Pues sí!... a los vàteres también les llega su hora... En honor a la verdad el demérito fué del fontanero quien, para evitarnos una reparación del averiado, tan costosa como su reemplazo por uno de nuevo, nos aconsejó liquidar definitivamente al viejo. Por ello, y para que el seguro asumiese dicha pérdida, decidió unilateral y definitivamente romperle el cuello de un martillazo. En fin... No hemos recuperado ni el 10% de su precio... económico, pues de haber sabido lo que nos ha costado realmente, casi hubiese preferido pagar integramente de mi bolsillo... Trinco trinco... pero la reparación!

En definitiva el váter paso a formar parte del mobiliario del balcón, en la galería de la cocina no cabía y visualmente no se avenía con el mobiliario, a la espera de la visita del perito... En calzoncillos y moreno semi-paleta de sacar el brazo iquierdo por la ventanilla del coche, por la noche, cuando empieza a refrescar y más cómodo que el suelo, resulta un váter de ceràmica... Qué hay manuel!, brazo en alto saludando al vecino... porrón de cerveza con limonada en el otro, olivillas... Pues mira! Vamos haciendo alfred!...

15 días y por fin llegó el perito... Lo observó tres segundos, con recelo y un ojo cerrado y... Sí, esta roto, dijo, llegando pues la hora de deshacerse de él... del váter, no del insigne colegiado... Con nocturnidad, chandal y alevosía, primer encontronazo en el ascensor con la guapa del quinto... buenaaaaas! ....enassss!... calor eh? ejem... Ya en la calle... Jua, jua, juaaas!... Putos niños!... Qué pasa!... Que tu no cagas o qué!... Pos claro!, pero no en la calle! Juajuajuaaaas!... La madre que los parió!... Noche fresquita, La Terraza llena, vecinos para más Inri... Paso firme, con seguridad, lo más normal del mundo... serenidad... calma alfred... flaquear de piernas... chándal que vacila conmigo y empieza a bajarse... Váter trágame y estira de la cadena!... Hacer equilibrios con una mano agarrada a los pantalones y la otra sosteniendo un inodoro en el hombro tiene un final más cantado que West Side Story -a no ser que seas butanero y aún, que los váteres no tienen asas para el estreñimiento...-. Sumémosle una terraza de un barrio etílico y 37 grados centigrados y de alcohol por cubata a la ya de por si terrorífica escena... Resultado: Un gran y merecido aplauso... coros incluso!... Oé, Oé, Oé, Oeeeeeé!... Solo faltó el levantamiento de carteles con la puntuación obtenida... Nine point seven!... Buuuuuu! Tongoooo!...

Y es que menos mal que jugaba en casa!... Por lo que la exhortación de un... Ya está bien, noooo?... fue bien acogida por los presentes como el inodóro en brazos de aquellos que, amablemente, y con un... Jo tío que bueno!, se unieron todos a una a su traslado al contenedor. Llevarme sentado en él a hombros cual Abraracurcix en la independentista Galia es un final alternativo que me reservo para el cortometraje... Basado en hechos reales esta vez... y tan jodidamente reales!

La próxima vez que ocurra algo así ya sabéis... Como Jack el Destripador y por partes...

04 Oct 2003 por Alfred

Avís legal versió express (+18)