![]() ... Así que nada quedaría en el tintero, ni por respeto o educación –excesiva- ni por miedo a perder aquello que tengamos: familia, pareja, amistad... Seríamos conscientes de nuestros errores y daríamos a entender, clara, explícitamente, aquello que nos desagrada de los otros... y mejorar claro, si es que realmente nos importan los demás y nuestro propio concepto, de nosotros mismos por subjetivos que seamos... Sinceramente desconozco si esta modesta proposición dará como resultado un asesinato colectivo... tu también hijo míooooo... o un mundo mejor, menos hipócrita y más sincero, auténtico en definitiva, donde pudiera hablarse -hacia fuera- con los nuestros, y además escuchasemos y además hiciésemos algo al respecto... Demasiados ademases creo, y pocos ademanes... En cualquiera de ambos casos... ¡me importa un bledo!
|